palabras Debbie Meda
fotos Paul Lopez, Debbie Meda
Las Vegas, NV – Durante la semana de SEMA 2015 pasamos unos minutos con el hombre loco de la Formula DRIFT, siempre energético, siempre al cien, Mike Whidett de Nueva Zelanda. Este año el llego a la serie en un Mazda Miata, “Radbul,” equipado con un motor de cuatro rotores con turbo, 1,200 caballos y unas llantitas 275 atrás.
DM: Si fueras sacando un auto de la concesionaria, cuales son las primeras cinco cosas que le modificarías para hacer drift?
MW: Las primeras cinco cosas que le aria a un auto de drift? La primera sería un motor rotary, o wankel como le dicen los alemanes, (todos los presentes se empiezan a reír, excepto Whiddet, quien esconde su irritación con una sonrisa sarcástica) porque para mí eso es ya de compulsión. De ahí yo diría que sigue la suspensión y unos rines porque el look visual es todo. Ya con un rotary de potencia se va a ocupar una transmisión más fuerte y un diferencial agresivo para poder ir y hacer drift.
DM: Descríbenos por favor, tu primer auto de drift?
MW: Mí primer auto de drift fue un 1978 Mazda 323 que es de tracción trasera y mis amigos y yo le pusimos un motor rotary cuando yo tenía 13 años.
DM: Se ve que este año estuviste a punto de hacer algo grande con tu auto que apenas vas probando. Que más tienes que cambiar o ajustar para poder triunfar en 2016?
MW: Este año fue uno de desarrollo para el proyecto Radbul y armamos el auto para que tenga la mayoría cantidad de poder y agarre. En términos del poder casi todo va a permanecer igual. Esta temporada usamos sólo 19 libras de boost a los turbos y aún le sacamos 1,200 caballos de fuerza al motor. No tuvimos problemas con la caja de cambios ni con el diferencial así que todo eso va a permanecer igual. Adquirimos mucha información sobre la suspensión, las presiones de las llantas y la alineación. Cosmética mente yo me aburro muy rápido del auto así que se va a ver totalmente diferente para la temporada que viene y no me puedo esperar para manejar.